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Así lo expresó Santiago Goodman, secretario de la Asociación de Trabajadores de la Educación de Chubut (ATECh), e integrante de CTERA, quien arribó a Neuquén para acompañar a la querella y al gremio ATEN en el juicio Fuentealba II.

Este viernes se cumplió la octava jornada en el juicio oral, con la presencia de referentes gremiales docentes de todo el país.

Goodman relató que desde la década de los 90s hubo distintos casos de represión a docentes y otros sectores, en el marco de reclamos salariales y, en ese sentido, subrayó la importancia de que estos hechos no queden impunes. Asimismo, destacó la importancia que tiene en particular para la docencia argentina el asesinato en 2006 del maestro Carlos Fuentealba.

También, habló sobre la criminalización de la protesta y recordó que él es uno de los tantos dirigentes gremiales procesados por la justicia, por reclamar una mejora salarial, en Chubut.